Licenciada en Historia Antigua y Arqueología y en Bellas Artes, especialidad en Conservación-Restauración por la Universidad de Barcelona (1984). Finalizados los estudios, trabajó en el Centro de Restauración de Bienes Muebles de Cataluña, en Sant Cugat del Vallès, como beneficiaria de una beca de conservación-restauración y posteriormente en el Museo de Historia de la Ciudad, como conservadora-restauradora de material arqueológico. En paralelo, llevaba a cabo la restauración de obras de arte, inicialmente desde su taller de la plaza Sant Josep Oriol de Barcelona y más tarde desde otros lugares, principalmente para coleccionistas privados.

A partir del año 1986 ganó una plaza dentro de la Diputación de Barcelona, en la Escuela de Artes y Oficios, iniciando con otros compañeros el Departamento de Conservación-Restauración e iniciando así 25 años de docencia con la formación de muchos futuros profesionales en la especialidad de “Restauración arqueológica”. Sus alumnos la recuerdan como muy buena profesora, muy cercana y que transmitía su amor por la profesión y por el patrimonio.

Desde el año 2011 pasó a formar parte del equipo que iniciamos el proyecto de creación del Laboratorio de Conservación-Restauración de la Oficina de Patrimonio Cultural del Área de Cultura de la Diputación de Barcelona, donde trabajó hasta el año 2018. Era responsable de la especialidad de conservación-restauración de material arqueológico -cerámica, metal y material orgánico, principalmente-, que daba servicio a los fondos patrimoniales de los museos de la Xarxa de Museus Locals (XML) y al Fondo Histórico-Artístico de la Diputación de Barcelona.

Mireia era una persona muy trabajadora, perfeccionista y tenaz -a veces muy tozuda-, con una gran fortaleza y un talante discreto y elegante. Durante su vida profesional pudo realizar sus grandes pasiones: el estudio de la arqueología, la restauración y la docencia.
Siempre estuvo muy vinculada a nuestra asociación, primero en el Grupo Técnico de Conservación-Restauración y posteriormente en CRAC, participando asiduamente en las reuniones técnicas y en las convocatorias de las asambleas.

Durante los últimos tiempos, su profesión le dio la fuerza para seguir adelante, a pesar de su enfermedad. Éste es el recuerdo que perdurará en nosotros como amigas y compañeras de profesión.

Anna Miquel, Marta Gabernet, Núria Avecilla,
Rosa Gasol y sus compañeras de OPC.